A lo largo de su carrera profesional, el gladiador panameño JMK se caracterizó por ser uno de los mejores valores de la lucha libre extrema, pero, en la actualidad, está batallando cara a cara contra un padecimiento que intenta arrebatarle uno de sus sentidos.
Y es que unos coágulos de sangre que aparecieron en sus ojos pretenden acabar con su visión y con una carrera en el pancracio, en la que ha entregado sangre, sudor y lágrimas.
"Todo comenzó en el mes de abril del año pasado, con unos problemas en la vista. No le presté tanta atención, porque pensé que necesitaba lentes. Hasta lo relacioné con la diabetes, porque todos los luchadores y empresarios saben que sufro de eso", manifestó JMK, quien tiene 11 años de carrera luchística.
"Cuando voy a comprar los lentes... La persona que se encarga de hacer la receta me dijo que me veía un problema. Entonces fui al oftalmólogo. La primera doctora que me vio, me indicó que tenía unos pequeños coágulos, pero que era normal y que se sanaban solos, pero al conocer que era diabético me recomendó ir con el doctor Juan Muñoz", agregó.
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Al atenderse con el nuevo médico, JMK conoce que tiene que hacerse exámenes más profundos para conocer qué estaba afectando su visión.
"El médico me dijo que es un coágulo grande de sangre que me está tapando él área por donde pasa el aire en el ojo. Eso es lo que me produce la ceguera, pero la situación es que si me tapa por completo el área perdería la vista", expresó JMK, quien es el actual campeón extremo de la empresa ACPI Panamá.
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"El doctor me dice que debo operarme en tres meses, ya que en ese tiempo podría perder la visión. La cirugía y los lentes que necesito tienen un costo de $2 mil dólares. Por eso este domingo por hoy se estará realizando un 'yappyton', en la cuenta de Instagram del @ironpanama", agregó.
Carrera
En la actualidad, JMK, de 31 años, asegura que en ocasiones ve 'pixeleado', brilloso y, en otras, todo oscuro.
"Después de la operación conoceré si podré luchar. Tengo entendido que son seis meses de recuperación, pero lo que sí tengo seguro es que no volveré a la lucha violenta. Si me toca retirarme, lo haré, pero no creo que me aleje de este deporte, porque puedo aportar mi experiencia en otros aspectos", finalizó.
Necesita una operación para no perder la vista.
31
años tiene el luchador JMK.
Todo comenzó en el mes de abril del año pasado, con unos problemas en la vista. No le presté tanta atención, porque pensé que necesitaba lentes.
El médico me dijo que es un coágulo grande de sangre que me está tapando él área por donde pasa el aire. Eso es lo que me produce la ceguera, pero la situación es que si me tapa por completo el área perdería la vista.
11
años de carrera en la lucha libre profesional.
2019
ganó el cinturón extremo de la empresa ACPI.
